He estado durante meses tratando de no mezclar temas, tratando de pensar que se puede ser vegano y estar engañado igualmente por la mafia de las farmacéuticas y no saber ni torta de Kary Mullis, el inventor de la técnica PCR, ni del engaño del SIDA, ni de cómo se transmiten los virus, ni de las intenciones de las élites que gobiernan en la sombra. Lo comprendo. No todos los veganos nacemos con un ansia enorme por investigar todo lo misterioso y oculto, como me ocurrió a mí. Pero llega un momento en la vida en el que tienes que mojarte, sobre todo cuando te sientes responsable de lo que ocurre a tu alrededor por ser un profesional sanitario con más de dos dedos de frente. Desde el minuto uno supe que no podía ser parte de la farsa. Y sabía que eso podía perjudicar mi activismo vegano. Pero no me quedó otra que hacer lo que siempre he hecho desde que recuerdo: defender la Verdad, pese a quien le pese, aunque eso conlleve la pérdida de amistades, de prestigio o de credibilidad. Solo lo lamento por las víctimas, sean humanas o no. Este blog se llama «Vet y vegan», y es un blog de activismo vegano para hablar sobre veganismo desde mi perspectiva como profesional veterinaria. Dentro de mi profesión, me interesé en especial por la medicina interna porque me apasiona el análisis clínico, y tengo un Máster en Virología, durante el cual estuve varios meses trabajando en el Centro de Biología Molecular Severo Ochoa, manipulando el virus de la hepatitis C, usando para ello cultivos celulares. Más adelante también me interesé por la homeopatía, ya que me sentía frustrada por los pobres resultados de la medicina convencional en gran número de patologías frecuentes en nuestros animales. Estudiando homeopatía oí hablar de Luc Montagnier por primera vez, un virólogo que la defiende abiertamente, porque muchos de nosotros, científicos libres de prejuicios y no dependientes económicamente de las grandes empresas farmacéuticas, no podemos negar la evidencia de que funciona, aunque aún no tengamos claro cómo.
He escrito esta larga introducción porque estoy bastante harta de los ataques e insultos que recibimos continuamente personas como yo por cuestionar la eficacia de la medicina convencional y buscar otras alternativas. Estoy bastante harta de ciertos autodenominados veganos que me dejan comentarios en alguno de mis blogs diciéndome que muy bien por ser vegana pero poco menos que llamándome magufa por ser partidaria de terapias alternativas como la medicina tradicional china (incluyendo acupuntura), flores de Bach o la ya mencionada homeopatía. Me hablan como si una fuera una ignorante que se traga todo lo que escucha, alguien que no pone en tela de juicio ni investiga todo lo que cae en sus manos, y vienen a darme lecciones sobre qué tratamientos tengo que utilizar en mi propia clínica, con mis propios pacientes, sin tener ni puñetera idea de lo que es tratar pacientes. Parece que a nadie se le ocurre preguntarse en qué universidades se estudia homeopatía y cuántos años hay que estudiar para poder empezar a practicarla. A nadie se le ocurre preguntarse cómo es que hay miles de médicos y veterinarios homeopátas en el mundo defensores de una terapia que según los pseudoescépticos solo son bolitas de azúcar con efecto placebo. A nadie se le ocurre preguntarse cómo un virólogo como Montagnier, premio Nobel por cierto, la defiende, dado su nivel científico. Cegados por sus prejuicios, solo vienen a insultarte y a dudar de tu profesionalidad sin tener ni de lejos la experiencia clínica o los conocimientos que yo llevo a mis espaldas. Y ya estoy bastante harta.
Comentarios
|
«El veganismo es en verdad la afirmación de que en donde haya amor la explotación debe desaparecer.»
- Leslie Cross, vicepresidente de la Vegan Society, 1951. Autora
Veterinaria y vegana. Una difícil combinación en los tiempos que corren. Libro
Relato
¡DESCARGA GRATUITA!
Solo por visitar mi página te regalo un relato corto sobre la peliaguda cuestión de si las plantan sienten.
El extraño caso del plátano sintiente Archivos
Febrero 2024
Categorías
Todo
|